Este blog ha sido creado con un único motivo, realizar un trabajo acerca de Teodoro de Cirene y su famosa espiral. El trabajo consiste en realizar un dibujo original con un formato original en el que se encuentre esta espiral.
Para comenzar con el trabajo, deberíamos familiarizarnos con la espiral de Teodoro:
La espiral consiste en ir montando triángulos rectángulos para formar las raíces cuadradas de números naturales. Se comienza con uno cuyos catetos son de uno y uno, por lo que su hipotenusa es raíz de 2. Sobre esa hipotenusa se monta otro triángulo rectángulo cuyos catetos sean la hipotenusa del triángulo anterior y otro que mida 1. Entonces la hipotenusa sería raíz de 3. Se vuelve a repetir el mismo proceso las veces que se quiera. La espiral es infinita, se puede hacer hasta el número que se quiera, ya que los números son infinitos.
Pese a parecer un dibujo totalmente contrario a la naturaleza, existen muchos objetos en ella que cumplan estos rasgos. Veamos unos ejemplos:
En la primera imagen parece claro que existe esta espiral, únicamente que funciona con una línea curva. Pero, a primera vista, la piña no parece que tenga esta espiral. Por supuesto, sí la tiene. Fijándonos bien, y por supuesto si no se ha caído ninguna, las semillas forman esta espiral, formando una línea similar a la de la primera imagen.
Vayamos con la foto.
Este dibujo es el de una ardilla, aunque posiblemente represente mejor a un dinosaurio. Temas artístico aparte, vemos que su cola está formada por la espiral de Teodosio.
Esta espiral brilla en especial por su simplicidad, y que además se pueda encontrar en elementos tan diversos como en una cola de caracol, una piña o en la cola de un dinosaurio es otra prueba para afirmar que las matemáticas pueden llegar a resultar perfectas.